- MEXICAN SUMMER (2012)
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8,5
- por Luis Fernández
La verdad, cada vez dan menos ganas de continuar con esto, de levantarte, de seguir como si nada. Cada día suena menos música, menos canciones, y más voces vacías, absurdas, que no dicen absolutamente nada. Ya estamos hartos; y esto deberíamos empezar a cambiarlo. Deberían empezar a surgir bandas que plateen un discurso coherente, que no estén dormidas, ni anestesiadas, y que tengan la capacidad de llevarte a otros lugares, a otros momentos. Si algo tiene la música, que está sobre el resto de artes, es que tiene el poder de recordarte aquellas situaciones que una vez disfrutaste, padeciste, sentiste… Una canción puede hacerte evocar cosas que ya fueron olvidadas, instantes que tienen una esencia distinta, y que no huelen al alquitrán que nos está tocando comer.
Best Coast saca nuevo disco, y tiene un sabor diferente.
Los primeros instantes de The Only Place te dicen que ya puedes respirar, que hace calor, que huele a mar y que eres libre. El primer corte, homónimo del álbum, es uno de los mejores: directo, sin dudas. La voz de Bethany Cosentino te dice que estés tranquilo, que cierres los ojos, que recuerdes: este es un disco de sensaciones, de disfrutar, de escuchar música de verdad. Un corte sencillo, fresco, y que llega en un momento inmejorable, cuando el calor y las noticias empiezan a derretir tus pies.
El grupo californiano recoge el testigo de su anterior disco, Crazy For You, con armonías cálidas, fáciles, pero con un gusto por el buen sonido y la producción que antes no tenían. Aquí no hay que hablar de madurez (y no deberíamos hablar de eso nunca), sino de crear un concepto diferente, pleno. The Only Place es un disco que tiene un discurso sincero, sin tonterías: ellos hablan de amor, de la vida, de lo que nos ocurre a nosotros. En Why I Cry no hay nada impuesto, hay un sentimiento, una razón. Este corte, al igual que Last Year, mantienen la máxima de crear canciones a partir de fundir la melodía de voz con la guitarra; un enlace genial que respira tranquilidad, gusto, y frescura. El dúo californiano sabe hacer buenas canciones que no deberíamos perdernos.
Así, llegamos a encontrarnos con cortes como My Life o How They Want Me To Be, más lentos que el resto, pero con una factura preciosa. En el primero, al igual que en muchos momentos del disco, aparece de alguna forma Jeff Mangum: la influencia de Neutral Milk Hotel (banda necesaria) últimamente se siente en los nuevos grupos que cruzan el Atlántico, algo que ya de por si es un placer.
Por otro lado aparecen Better Day, con una base rítmica inmensa, y Do You Love Me Like You Used To: dos cortes que nos llevan a otro momento, a las guitarras coloreadas de los 60 y la frescura del surf. Y es que Best Coast ha sabido reciclar la herencia de grupos como The Seeds o Shoking Blue (aunque esto son palabras mayores) para entrar en ese segmento de nuevas bandas que también han sabido mamar de una generación eterna: The Pains Of Being Pure At Hear y Girls son buenos ejemplos de ello.
Ya por último aparece Dreaming My Life Away, una de las canciones más flojas del disco, donde se busca el trance a través de la repetición de estructuras. Un ejercicio atmosférico que pierde gracia frente a la intensidad del resto de los temas. Temas como Let´s Go Home, que nos regala un final perfecto volviendo a la frescura del momento, a la música de verano.
En definitiva: The Only Place es un disco de canciones; canciones de esas que últimamente han desaparecido, que ya no se hacen, que se olvidaron. Es un disco que sabe al pasado, a un momento que ya nunca volverá, que estaba perdido. Son temas que sirven para volver a viejas situaciones, y recordar que es necesario volver a saborearlas para entender lo que nos estamos perdiendo.