No debe ser fácil estar dentro de los Arctic Monkeys. Luchar contra las sensaciones y riquezas que produce la fama, tener que estar a la altura en cada álbum… y tener que aguantar a cada uno de los enemigos que van creciendo a lo largo de tu carrera. Estar en la cumbre implica ser el centro de todas las miradas y fabricar numerosas enemistades.
En HABLATUMÚSICA hemos visto que, aunque no sean demasiados, los de Alex Turner cuentan con unos cuantos enemigos que hemos seleccionado en esta lista:
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2006 fue el año en el que tanto Arctic Monkeys como The Kooks daban el salto a la liga mayor del álbum. Ambas bandas debutaban en una época en la que las guitarras estaban de moda. La formación de Brighton tuvo que enfrentarse a ‘Whatever People Say I Am, That’s What I’m Not’ (Domino, 2006) con su primer álbum,‘Inside In/ Inside Out’ (Virgin, 2006). Pese a que el debut funcionó, toda la masa mediática se volcó con los de Alex Turner. Ahí se inició una pelea que no llegó a los tiempos Oasis-Blur pero que tuvo momentos un tanto tensos.
El cantante de The Kooks, Luke Prichard, aseguró en 2008 que había agredido -un puñetazo- a Turner tras un problema con las guitarras. Arctic Monkeys siempre negaron el saludo a los de Brighton y con el tiempo y los discos, parece que el puñetazo más gordo se lo han llevado The Kooks y su comparación con la carrera de los de Sheffield.
Los de Chicago definieron a Arctic Monkeys como “una especie de Backstreet Boys o algo parecido”. Toda la polémica comenzó cuando The Orwells fueron llamados a filas para que telonearan a Alex Turner y los suyos durante la gira estadounidense de ‘AM’ (Domino, 2013).
Tras unos cuantos conciertos, The Orwells comprobaron que todos los conciertos de Arctic Monkeys eran el mismo, dejando poco lugar a la improvisación. Turner respondió a las críticas diciendo que “deberían haber intentado echar un polvo en lugar de verles en directo cada noche”.
De entre todos los “enemigos” que puedan tener Arctic Monkeys, quizá Fat White Family hayan sido los más cruentos. El cantante debutante banda londinense, Lias Saoudi, etiquetó a Alex Turner de “imbécil”, “broma” y “puto rey bufón”. ¿Por qué? Saoudi vio el discurso del líder de los Monkeys en los Brit Awards y parece que no le gustó demasiado.
“No me gusta esa pequeña zorra, es una maldita broma. Es lo menos rock and roll que he visto en mi puta vida. Su discurso fue terriblemente vergonzoso. me hizo sudar, como cuando ves algo que te hace temblar”. Pues eso.
Si hay una tradición bien arraigada en la cultural musical de las islas britanica es: si ganas mucho dinero con tu música, ocúltaselo al fisco. La hacienda británica descubrió que Arctic Monkeys -como antaño hicieron Pink Floyd o The Rolling Stones– habían defraudado grandes cantidades de dinero -algo más de dos millones de libras- Arctic Monkeys esta vez no quisieron responder a las acusaciones.
Viajemos una década al pasado. En 2004, Arctic Monkeys eran todo un fenómeno viral de la Música. Gran Bretaña había descubierto a una jovencísima banda que no pertenecía a ningún sello y que para escuchar sus canciones había que acudir a Myspace o algún sistema P2P. Los de Sheffield renegaban de la industria porque habían conseguido el éxito sin su ayuda. Un par de años después acabarían firmando con Domino, la discográfica con la que aún siguen.
El líder de Peace, Harry Koisser, afirmó hace unas semanas que Arctic Monkeys ya no eran “indies” porque su música no sonaba “indie”. Koisser decidía convertir el fenómeno independiente en sonido. Cabe recordar que Peace pertenecen a la multinacional Sony.
Dejando a un lado el gran ‘Divide and Exit’ (Harbinger, 2014), la lengua viperina de Jason Williamson es una de las cosas más divertidas que le ha pasado a la Música en los últimos tiempos. El cantante de Sleaford Mods está cansado de todo el aire mod que llevan los caballeros de la música británica. Noel Gallagher, Paul Weller, Miles Kane y el propio Alex Turner son objetivos recurrentes de su jocoso humor.
De Turner llegó a decir hace unas semanas que es “un muñeco de cera lleno de estereotipos” y declaró que “ha tomado el camino equivocado [en su carrera], no sabe lo que hace. Esa pequeña cosa que tenía se fue hace mucho tiempo”.
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Su antiguo bajista
Bueno, nunca ha dicho nada pero… debe odiar a Arctic Monkeys. Andy Nicholson salió del mapa musical cuando el éxito de la banda comenzaba a ser brutal. Gordito, tímido y poco agraciado, Nicholson dejó la banda porque “no soportaba el éxito” y estaba “fatigado”, lo que suena a aunténticas excusas. Nicholson sigue siendo «un buen amigo de la banda» pero… ahora sus compañeros están forrados y son una de las bandas más importantes del planeta y eso debe escocer. ¿Qué será del bueno de Andy?
Todos son culeras XD No, nocierto. Soy fan de los monos chance desde el ’06 – ’07 que eran mis tiempos de secundaría, y sí he notado cabrón los cambios, desde el Humbug, el SIAS y el AM tienen cambios graves, y pues, realmente está bien, no es como que una buena banda se haga tocando lo mismo y siendo los mismos durante años… Quizá han tenido actitudes (Y más Alex) un tanto «mamonas» pero he considerado seguido que debe ser ese papel que el mundo de la música le exige al protagonista de ser «polémico».
Alex Turner se esfuerza demaciado XD
Reconozcamos q desde poquito antes de AM se volvieron bastantes pedantes , pretensiosos y agrandados especialmente Alex
callate eso no es cierto solo tienes envidia
Que tonto fue Andy Nicholson.
en esa lista faltó yo =)