Hay una época de la historia de la música española que me fascina. A principios de los años 80, mientras se imponía la explosión de color y la música pop, los jóvenes más inconformistas optaron por explorar los sonidos más oscuros y la estética siniestra, convirtiéndose en los más transgresores del movimiento cultural que se vivía.

Esta corriente estético-musical se bautizó como «spanish post punk» y «dark pop» y, pese a que para muchos pasara desapercibida por ser menos comercial, ha sobrevivido muy bien en el tiempo y muchos de los discos de la época a día de hoy están muy cotizados en eBay. Por eso es de agradecer que el sello Munster haya editado con mucho gusto ‘Sombras. Spanish Post Punk and Dark Pop 1981-1986‘ (Munster Records, 2014), un recopilatorio que refleja fielmente este movimiento musical. Y digo con gusto porque, además de la opción CD con su libreto que informa brevemente sobre el movimiento y sus protagonistas, también se ha currado una edición con 4 vinilos.

A nombres más conocidos como Parálisis Permanente, Derribos Arias o Décima Víctima, se suman otros como Los Monaguillosh, Claustrofobia o Matrona. Estaba de moda reivindicar a través de la música y las letras hablan de la asfixia del poder, del aborto o los chanchullos de la iglesia… en definitiva, una manera de vivir la música que refleja una juventud con ganas de cambiar el mundo y sobre todo de aprender cosas nuevas. Una sociedad que deja de estar desinformada y pasa de que les manipulen.

Quizás es el momento de volver al post punk y dark pop y pasar de esta sociedad sobreinformada y manipulada de la que inevitablemente formamos parte.