Conor Oberst ha estado muy activo tras el que fue, allá por 2007, su último disco con el nombre de Bright Eyes, Cassadaga. Dos discos en solitario y uno de Monster of Folk después vuelve a aparecer. Y debería no haberlo hecho, porque el nuevo álbum, The People’s Key, no aporta absolutamente nada a la, hasta ahora, brillante discografía de la banda. El disco, parece otro más de su carrera como solista, como aquellos Conor Oberst (2008) o Outer South (2009) que no regalaban mucho más que un par de buenas canciones que suponían una vía de escape a la calidad que había trabajado en Bright eyes.
The People´s Key es un álbum mucho más eléctrico, de rock, que deja atrás por completo su vertiente más folk, y que pasaría completamente desapercibido de no ser porque algunos esperábamos con muchas ganas la salida del disco tras el sobresaliente Cassadanga.
Un álbum que comienza con una pieza de más de dos minutos de un tipo hablando, empieza mal, desinflado, sin esa aceleración que te incite a escuchar ese disco una y otra vez, a ponerlo en tu reproductor y dejarte llevar. Eso sucede con Firewall, el corte que abre el disco. La fuerza la recupera con la segunda canción, Shell games, buena canción, si, pero si tenemos que destacar una canción que se parece a otras tantas anteriores, quiere decir que la cosa está bien floja. Al final de la tercera, Jejune Stars, vuelve “la voz” de la introducción. Y la cosa empieza a desesperar, pierde todo el ritmo que parecía que había ganado con Shell Games y es entonces cuando el disco se va desinflando poco a poco hasta desaparecer. Y esto en tan sólo tres cortes. El resto se cubre con canciones irregulares, que no animan a ser escuchadas más veces. Una lástima.
Nota: 5 /10
Jesús Castellanos