Shulamith Firestone murió el pasado año sola y loca. Hacía años que se la trató con cierto reconocimiento como radical feminista tras hacer público el texto ‘La dialéctica del sexo’, una obra en la que proponía cadenas futuristas de creación de bebés para liberar a la mujer de su sino como hembra y así conseguir la igualdad real. Tiranía de la familia biológica, decía. Del nombre de la escritora ha sacado Channy Leaneagh su segundo trabajo ‘Shulamith‘ (Memphis Industries, 2013).
‘Give You The Ghost‘ (Totally Gross National, 2012) fue un debut que tenía cierto toque sensual y adictivo e incluso atractivo. Contaba con registros que animaban a la curiosidad y que, sin embargo, se hacía demasiado extenso en conjunto. Pasado año y medio, la propuesta de Leaneagh por el ochentismo y la estética se ha agotado tan rápido que sorprende.
Porque ‘Shulamith‘ puede ser muchas cosas pero lo peor es su apología al aburrido. 12 cortes bañados en capas y sintetizadores que se repiten hasta dejar sin intensidad alguna el trabajo. Cuatro minutos por canción en un paseo agónico sin ritmos ni carisma. Esta continuación no puede tratarse de otro modo que de decepción bañada en auto-tune. Las horas pasan lentas y se despierta cierta alegría cuando termina.