Somos seres humanos, unos días somos brillantes y otros queremos hundirnos en las sábanas para no ver la luz del sol. Lo importante es cómo salimos de ese bache y, a veces, necesitamos ayuda para hacerlo. No importa cómo conseguimos esa confianza, sino lo que logramos hacer con ella una vez la poseemos. No hablamos de autoayuda o libros de farsantes chamanes, hablamos del poder de la música.
Esa es la idea tras el nuevo Polo, todo lo que conseguimos con esa inyección de confianza que anhelamos y necesitamos; la seguridad y lo que conseguimos hacer con ella. ¿Y qué mejor sitio que el propio coche, tu santuario, para poner a prueba esa determinación? Estas 5 canciones son un chute de confianza para hacer lo que creas más conveniente con ella, aunque nosotros te damos alguna sugerencia.
[TS-VCSC-Divider divider_type=»ts-divider-two» divider_text_position=»center» divider_text_border=»#eeeeee» divider_image_position=»center» divider_image_border=»#eeeeee» divider_icon_position=»center» divider_icon_color=»#cccccc» divider_icon_border=»#eeeeee» divider_border_type=»solid» divider_border_thick=»1″ divider_border_color=»#eeeeee» margin_top=»-30″ margin_bottom=»0″]
-
‘Eye of the Tiger’
En el propio anuncio ya nos muestran de lo que es capaz este tema de Survivor. Pero, ¿por qué solo un beso? Coge a la madre de María y llévatela a dar una vuelta en tu coche.
-
‘Let’s Get It On’
Seguramente pensemos lo mismo, es el poder de esta canción de Marvin Gaye. El asiento de atrás del Polo es bastante grande… tú sabrás qué quieres hacer en él.
-
‘La Grange’
Recoge a tus colegas, pon a ZZ Top a todo volumen y la noche es tuya. Ese riff hará que todos cantéis aquel “hau hau hau hau” a pleno pulmón.
-
‘Alive’
Si con este clásico de Pearl Jam no te invade la adrenalina, nada podrá. Coge a tu pareja (o a la que quieres que lo sea), súbela al coche y tendrás la fuerza para lanzarte a ese último paso al que no te atrevías.
-
‘Echoes’
No habrá carretera que se te escape con este tema de Klaxons. Allá donde quieras ir, por lejos que esté y difícil que sea llegar, ni siquiera te habrás parado a pensarlo cuando empieces a pisar el acelerador.