Todo el mundo debería saber que los primeros robots inteligentes fueron Kraftwerk, músicos alemanes y niños de postguerra que decidieron desprenderse de todo lo que no fuese su forma humana para cambiar a base de cable y botón la historia de la Música. Tal vez el horror de un país destrozado fue lo que les movió hacia unos sonidos inverosímiles.
Repitiendo gesta se encuentra Arcano Guzmán. Desde una Valencia avasallada no por bombas sino por liberalismo y manga larga, aparece una rareza que revisita aquellas primeras sensaciones con inteligencia y rigor. Desde los inicios de este 2014, Paco Mut y Gaston Nosiglia han decidido convertirse en computadoras a tiempo parcial y fabricar una maraña de sonidos que rinden culto a los alemanes con un gusto sorprendente.
Así nace ‘Lunokhod’ (Autoeditado, 2014), un EP de cuatro temas en el que imaginar paisajes desolados por la ingeniería de la vida futura, poniendo sintonía a Isaac Asimov o a los viajes que imaginaba Enrique Gaspar en ‘El Anacronópete’ (1887) en una mezcla de patria y steampunk.
En apenas 15 minutos, las composiciones de Arcano Guzmán nos dan una demostración de cómo tirar de electrónica retro y percibir la sensación de estar disfrutando de una obra de artesanía como con la que sorprendió en su momento el inquietante Diego García.
