Si uno de tus primeros bolos es nada más y nada menos que en la sala Razzmatazz de Barcelona, será por algo. El del viernes 18 de mayo puede ser un punto de inflexión en la breve trayectoria de Misfru, una joven formación afincada en el corazón de Cataluña que recientemente ha publicado su primer EP, Memòria de peix, íntegramente en catalán. “Esto se nos está empezando a desbordar”, reconoce Esteve Martínez, bajista de la banda de Manresa, tras superar las 4.000 visitas en su bandcamp y tras ver que poco a poco su atrevido indie-funk se empieza a dar a conocer.
Detrás de su peculiar nombre, Misfru, no se esconde ningún significado especial. Simplemente es un juego de palabras que gustó desde el principio a Clara, Marc y Esteve, tres jóvenes músicos que en 2011 decidieron emprender un proyecto conjuntamente. “Nos llevábamos muy bien y nos juntamos por casualidad. Siempre nos lo hemos tomado todo con mucha calma pero ahora la cosa está animando”. Y es que a pesar de tener pocos meses de vida como grupo, el viernes tienen la oportunidad de actuar en uno de los recintos más prestigiosos de la escena alternativa barcelonesa. Ésta se la brindó la productora La última escena tras descubrir sus primeros temas en Youtube.
El estilo de Misfru seduce desde la primera escucha. Por la frescura de sus melodías y por lo bien que logran aunar esencias funky de los 70 con unas bases pop muy pegadizas, al más puro estilo Two Door Cinema Club. Y todo ello, con una espontaneidad pasmosa. “Contra más intentamos ofrecer algo diferente, peor nos sale el invento. La naturalidad nos sale cuando no pensamos. No somos un grupo de posturitas”, afirma convencido Esteve Martínez.
por Sam Gutiérrez